Tumberos

Este capitulo merece empezar con un “pipipipipipipi pi pi piiiiipiiiii” (Música de Tumberos)

Dentro de la comisaría, los canas se dispusieron a meterlo a Alejo en un sucio y apestoso calabozo.

Cuando terminaron de quitarle todas las pertenencias a Macarena, la metieron en EL MISMO CALABOZO EN EL QUE ESTABA ALEJO!

Ninguno se dirigió la palabra porque se veían caras conocidas y tenían miedo de manchar su reputación…

De repente Alejo no aguantó más y la miró fijo hasta que vio quién realmente era y no lo pudo creer.

Se volvió a dar vuelta para pensar bien su estrategia ya que temía mandarse alguna cagada, así que pensó una astuta y rápida pregunta adaptada a la situación en la que se encontraba.

Finalmente decidió entre tantas preguntas inteligentes por la más astuta y le preguntó: - “Venís siempre por acá flaquita?”

A lo que Maca cual diva le respondió: -“No! Es mi primera vez… Medio choto el lugar, pero me dijeron que se re pone. Además entré gratis y si hacer cola”

Así estuvieron conversando un largo rato hasta que Alejo no pudo contener esas ganas locas de cagarla a trompadas con una mezcla de querer comérsela toda…

No aguantó y le volvió a comer la boca de un beso… Pero Maca no entendía nada y le pegó terrible piña (de nuevo) y le dijo: -“Pero, vos, sos loco, viteh?!”

Alejo se cansó y le dijo de todo, le vomitó todo aquello que se venía guardando: -“Pendeja de mierda, hace como 3 meses estuviste en mi bar, nos comimos zarpadamente la boca a besos, te busqué por todos lados para darte tu DNI del orto y ahora que nos volvemos a encontrar por estas locas vueltas de la vida, te ponés como una cabra loca?!” (Los autores del relato nunca vimos una cabra loca, pero imaginamos que debe volverse muy loca)

Macarena seguía sin entender nada y le dijo: -“Ahhhhhh! Boludo! Vos sos el carnicero!!!”

Claramente, su memoria había sido destrozada luego del accidente…

Así quedó, chapita, chapita…

Alejo simplemente le dijo que confiara en él, y cerrara los ojos. Macarena por algún motivo extraño, se vio seducida por sus palabras y cerró lentamente sus ojos. Tan lentamente que le tomó 4 minutos, pero los cerró. Alejo se acercó suavementeeee, besame, que yo quiero sentir tus labios, besándome otra vez suaaave ♫ perdón, nos dejamos llevar, en donde habíamos quedado? Ahhh sí. La besó suavemente y ella simplemente no sintió nada, pero había algo en él, su aroma, era una mezcla de alcohol y olor a chivo que recordaba de algún lado, y ahí recordó todo. No pronunció palabra, simplemente estampó sus labios contra los suyos con pasión y frenesí. Comenzaron a acariciarse y tocarse hasta el último rincón oscuro de sus cuerpos.

Se quitaron lentamente la ropa, mirándose fijo a los ojos. Macarena esbozando su belleza a flor de piel (gracias a los caros cosméticos), se dio vuelta y se tomó de los barrotes. Alejo se lamió los dedos y se peinó las cejas y con cara de galán se aceró a Macarena y le apoyó el miembro… Le había apoyado la mano en la cintura y cuando estaba por concretar en su mente escuchaba el relato del gol del Diego contra los ingleses! Había pasado a todo el equipo, gambeteó al arquero, definió y cuando la pelota está a punto de meterse en el arco…

Llegó Vladimir con la buena noticia de que le había pagado la fianza cuando estaban a punto de concretar el encuentro y se la llevó de los pelos a los gritos de: “Puta de mierda! Con cuántos estuviste antes que conmigo? Pensé que era el único a quien realmente amabas! Yo vengo como un boludo porque no sólo soy tu abogado de confianza sino porque realmente te amo y mirá como te encuentro? Decí que no te devuelven la guita de la fianza, sino te dejaría acá adentro hasta que te coman las ratas, gato descalcificado…” y así de la nada, Macarena desapareció de su vista.

Se sintió como si hubiera tenido todo, y en un segundo lo hubiera perdido todo. Y tenia toda la razón, ya que ni la ropa le dejaron. En joda los canas cuando abrieron las rejas, le sacaron la ropa y Alejo quedó en bolas, pero no le importó, porque bastante caliente quedó como para pasar frío.

79 horas después, Vicky y Bernie lograron juntar los $12.60 de fianza y sacaron a Alejo, llevándolo a su casa, y obligándolo a bañarse.

Macarena por su lado, tras recibir la paliza de Vladimir, se encontraba sola en su casa y tras varios días pensando se dio cuenta que esa noche en la comisaria había perdido una parte suya… SU DOCUMENTO!!!

Cómo seguirá esta historia? Macarena ya recuerda todo, y Alejo quedó re caliente. Concretaran el encuentro? Recuperará maca su documento? Cómo afrontará esta nueva etapa Alejo y su bar?. Lo sabremos en los próximos episodios de “HOY NO TOMAMOS LAS PASTILLAS”.

Que al pedo que estás para llegar leyendo hasta acá eh!... Gracias!!!!